Fundación Patrimonio Comunal Olivarero

Noticias de actualidad

23May 2022

Desarrollan un método para verificar el origen geográfico del aceite de oliva

Barcelona, 20 may (EFE).- Investigadores de la Universidad de Barcelona (UB) han desarrollado un nuevo método para tomar “la huella dactilar” al aceite de oliva virgen y verificar así su origen geográfico para evitar adulteraciones y fraudes comerciales.

La nueva metodología, que publican las revistas ‘Food Chemistry’ y ‘Food Control’, la han desarrollado científicos de la Facultad de Farmacia y Ciencias de la Alimentación y del Instituto de Investigación en Nutrición y Seguridad Alimentaria (INSA) de la Universidad de Barcelona (UB), con la colaboración del Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentarias (IRTA).

“La nueva metodología permite discriminar entre los aceites de oliva vírgenes producidos en la Unión Europea y los que no lo son, además de clasificarlos de acuerdo con el país de origen y verificar qué aceites son los que pertenecen a denominaciones geográficas protegidas de una misma región o incluso adyacentes”, han explicado las investigadoras Stefania Vichi y Alba Tres, coordinadoras de la línea de investigación en autentificación de alimentos del INSA.

El nuevo método está basado en analizar los hidrocarburos sesquiterpénicos, unos compuestos orgánicos formados por tres unidades de isopreno, que han demostrado ser excelentes marcadores del origen del aceite de oliva.

“La piedra angular de una herramienta de autenticación eficiente es que se fundamente en marcadores analíticos robustos. En el caso de la autenticación geográfica del aceite de oliva virgen, los marcadores deben depender mayoritariamente de la variedad del olivo y su área de cultivo, sin que estén influidos de manera significativa por otros factores relacionados con la extracción o conservación del aceite”, ha detallado la investigadora Beatriz Quintanilla-Casas (UB-INSA).

“Los hidrocarburos sesquiterpénicos presentes en el aceite de oliva virgen cumplen los requisitos anteriores –según la experta– y son marcadores geográficos robustos de este producto comercial. Además, al ser compuestos semivolátiles, se pueden analizar fácilmente mediante una cromatografía de gases acoplada a la espectrometría de masas con una microextracción previa en fase sólida, un procedimiento relativamente rápido y automatizable que no requiere uso de disolventes”.

El nuevo método es capaz de autentificar los aceites de oliva vírgenes a través de un ‘fingerprint’, que opera de forma similar al reconocimiento inequívoco de las personas mediante las huellas dactilares.

“En este caso -según Stefania Vichi-, la huella digital sesquiterpénica se usa para desarrollar modelos de discriminación geográfica que permiten identificar aquellos aceites que presentan una señal analítica muy distinta a los considerados de referencia”.

“Tradicionalmente -ha precisado Alba Tres-, los métodos de referencia para autenticar productos se basan en determinar uno o unos pocos compuestos, por lo que se establecen unos límites legales en su proporción para decidir si el producto cumple o no ciertas especificaciones”.

Los métodos no dirigidos -como el ‘fingerprinting’- permiten utilizar toda la información analítica disponible en lugar de centrar la atención en determinados compuestos, como hacen los métodos tradicionales, según la investigadora.

El carácter innovador de esta estrategia analítica radica en proponer unos marcadores geográficos no muy estudiados hasta ahora, mientras que la técnica analítica está al alcance de la mayor parte de los laboratorios de control, públicos y privados.

Los investigadores han puntualizado que el proceso para que un método analítico se transforme en una metodología oficial con validez legal es lento y complicado, con lo que esta nueva técnica primero se implantará en los laboratorios de inspección y control, las entidades de certificación y las grandes compañías comercializadoras del sector oleícola. EFE

Fuente: La Vanguardia

Artículos relacionados